Las ovejas han tenido una larga historia como parte de las delicias culinarias del mundo, tanto si piensas en el omnipresente cordero asado que impregna la cultura británica, como en las ovejas que estaban en el pesebre con José y María cuando nació el Mesías cristiano, las ovejas han estado con nosotros mucho tiempo. El Día de la Pierna de Cordero Asada celebra el más popular de los platos a base de oveja, la pierna de cordero asada, rica, sabrosa y a menudo servida con menta, es difícil equivocarse con una buena pierna de cordero asada.
Historia del Día de la Pierna de Cordero Asada
Cuando decimos que las ovejas llevan mucho tiempo con nosotros, queremos decir muchísimo tiempo. El origen de las ovejas domesticadas se remonta al 11.000 a.C. en Mesopotamia, y comparten la distinción de ser uno de los primeros animales domesticados por la humanidad. Estas ovejas eran conocidas como muflones, y no eran exactamente las ovejas lanudas que conocemos hoy.
Entonces se criaban por su carne, su leche y su piel para el pergamino y la vitela. De hecho, la lana por la que hoy pensamos en las ovejas no fue una parte importante de su uso hasta el 6000 a.C. en Irán.
Lo que el Día de la Pierna de Cordero Asada sirve para recordarnos, es que cuando nos deleitamos con este maravilloso plato, estamos compartiendo una comida que nuestros antepasados han compartido durante miles de años. La carne de cordero y la leche de oveja han sido una proteína básica desde que pasamos de la caza y la recolección a un estilo de vida agrícola.
Ahora el cordero es una carne muy apreciada, un alimento básico importante en culturas de todo el mundo, mientras que su lana es vital para muchas economías. Así que en el Día de la Pierna de Cordero Asada honra a este noble animal y su contribución a la cultura humana
Cómo celebrar el Día de la Pierna de Cordero Asada
La mejor manera de honrarlo es deleitarse con un delicioso plato de Pierna de Cordero Asada. Si nunca has preparado pierna de cordero asada, es extraordinariamente sencillo. Sólo tienes que ponerla en una sartén para asar y frotarla con aceite de oliva, y luego darle un buen espolvoreo de sal y pimienta. Ásalo en el horno durante 5 minutos, dale la vuelta y vuelve a asarlo, y luego aplica una buena dosis de romero y ajo. Cúbrelo con papel de aluminio y ásalo durante una hora a 325ºF. Voilà, ya tienes una magnífica pierna de cordero asada, ¡y tú y tu familia podéis alegraros!
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