Es 2 de enero, el comienzo de un nuevo año, y acabas de superar la resaca: ¿qué momento podría ser mejor para estar motivado e inspirado? Tienes 365 días por delante, ¡y ahora es el momento de empezar a hacerlos valer!
La historia del Día de la Motivación y la Inspiración
Aunque para muchos, el 2 de enero se trata de superar por fin la resaca de la fiesta de Año Nuevo, la historia del Día de la Motivación y la Inspiración es mucho más sombría. El Día Nacional de la Motivación y la Inspiración fue aprobado por el Congreso de Estados Unidos el 18 de diciembre de 2001, tras los trágicos acontecimientos del 11 de septiembre de 2001.
Fue entonces cuando Kevin L. McCrudden se convirtió en el primer y hasta ahora único orador sobre motivación y liderazgo que ha conseguido que el Congreso apruebe dicho día, reconociendo la importancia de la «motivación» y la «inspiración» en nuestra vida cotidiana.
Tras la tragedia del 11 de septiembre de 2001, McCrudden pensó que todos los estadounidenses necesitaban algo que les recordara que todavía había muchas cosas por las que vivir. La realidad era sombría en aquel momento, y muchas personas se sentían tristes, asustadas o perdidas, especialmente aquellas cuyos familiares o amigos habían muerto repentinamente en los atentados del World Trade Center de tan sólo unos meses antes. En un principio, McCrudden pretendía que este día se dedicara a ayudar a las personas a ser lo mejor posible y a maximizar su potencial mediante la creación de objetivos anuales.
La idea caló rápidamente, y el Día de la Motivación y la Inspiración se celebra ahora en distintos lugares del mundo y en Estados Unidos, animando a la gente de todo el mundo a cambiar su vida a mejor.
Cómo celebrar el Día de la Motivación y la Inspiración
Hay algunas cosas que puedes hacer para celebrar este día especial. En primer lugar, teniendo en cuenta los sucesos del 11 de septiembre de 2001 que condujeron a la creación del Día de la Motivación y la Inspiración, sería bueno dedicar uno o dos minutos de silencio por respeto a los hombres y mujeres que perdieron la vida por el terrorismo de forma tan repentina ese día. Y luego honrar su memoria apreciando tu propia vida y haciéndola mejor
Hay muchas formas de hacerlo. Una de ellas es pensar en alguien de tu vida que te inspire, ya sea tu madre, tu padre, tu cónyuge o un amigo, y encontrar una forma de mostrarle aprecio por ser quien es. El gesto no tiene por qué ser grandioso: lleva a tu madre, a tu padre o a tu amigo a comer y hablad de su vida y de lo que les ha ayudado a ser tan fuertes como son, agradéceles que te hayan enseñado a afrontar los retos de la vida. Compra una buena botella de vino para tu cónyuge y asegúrate de pasar la noche con él o ella, diciéndole lo contento que estás de poder compartir tu vida con él. Con demasiada frecuencia en la vida, la gente da por sentado a sus allegados, pero nunca deberíamos perder la oportunidad de decir a las personas que son especiales e inspiradoras para nosotros lo mucho que las apreciamos.
También puedes empezar a hacer algo que has querido hacer durante mucho tiempo, pero que has ido posponiendo. Apúntate a una clase de artes marciales, empieza a aprender un nuevo idioma, haz una lista de libros para leer o compra un libro de cocina lleno de recetas sanas para preparar para tu familia en lugar de comer comida para llevar todas las noches.
Sea cual sea la forma en que decidas celebrar el Día de la Motivación y la Inspiración, asegúrate de que cambia tu vida para mejor y te ayuda a apreciar más la vida
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