Desnúdate hasta el traje de baño, da unos pasos sobre la nieve y el hielo que cubren el suelo, y lanza tu cuerpo al agua helada. ¿Suena divertido? Pues hay mucha gente que piensa que sí, ¡y esta gente se reúne para esto todos los años! A veces es con fines benéficos y a veces sólo por un reto, pero en cualquier caso, miles de personas de todo el mundo se lanzan a las aguas heladas del invierno cada año.
Estas nadadas se denominan, como es lógico, «nadar entre osos polares», y suelen tener lugar en el mar.
La historia del día de la natación del oso polar
La natación del oso polar se practica desde hace más de cien años en distintos países. El primer registro de la natación del oso polar tuvo lugar en Boston en 1904. En muchas comunidades canadienses, lanzarse al agua helada para nadar es una tradición del día de Año Nuevo. El Club de Natación del Oso Polar de Vancouver lleva en activo desde 1920 y suele tener entre 1.000 y 2.000 participantes inscritos cada día de Año Nuevo, con un récord de 2.128 inscritos en la Natación del Oso Polar de English Bay en 2000.
Parece que los Países Bajos han superado con creces a Norteamérica, ya que unas 10.000 personas se zambullen cada año desde 1960 en el agua helada del mar de Scheveningen, la principal ciudad balnearia de los Países Bajos. De hecho, se calcula que en toda Holanda, 30.000 personas participan en lo que llaman «Nieuwjaarsduik» (inmersión de Año Nuevo) todos los años.
Se considera que el día de Año Nuevo es el mejor para este tipo de natación, porque, como han señalado muchos participantes, después de haberlo hecho, ningún reto que el Año Nuevo pueda suponer te puede hacer perder la cabeza. Sin embargo, algunos clubes de natación organizan sesiones regulares de invierno. Plungapalooza es la mayor zambullida de osos polares de Estados Unidos, que se celebra anualmente en el Parque Estatal de Sandy Point, en Maryland.
El evento, que recauda fondos para las Olimpiadas Especiales, ha conseguido recaudar millones de dólares. El mayor Plungapalooza hasta la fecha tuvo lugar en 2008, con una participación estimada de 12.000 personas.
Cómo celebrar el Día de la Natación del Oso Polar
En realidad es muy sencillo: ¡participa! Averigua dónde se organizará el Día de la Natación del Oso Polar más cercano y apúntate. Puedes ayudar a recaudar dinero para los que lo necesitan, conocer nuevos amigos y crear unos recuerdos increíbles Sin embargo, debes tener en cuenta que los seres humanos no tienen la grasa y el pelo que tienen los osos polares para protegerse del frío.
Entra en el agua lentamente para que no sea un choque demasiado fuerte, y asegúrate de tener una toalla y ropa seca preparadas para cuando salgas del agua. También deberías calentar tu cuerpo después desde dentro hacia fuera con una bebida caliente o un plato de sopa. La natación del oso polar tampoco es adecuada para todo el mundo, ya que desencadena muchas reacciones corporales intensas: puedes empezar a hiperventilar debido a la imposibilidad de respirar profundamente durante los primeros 30 segundos aproximadamente, y es probable que tus latidos del corazón y tu presión arterial aumenten drásticamente.
Así pues, si tienes alguna afección cardíaca o tiendes a entrar en pánico, tal vez sea mejor que te quedes en la orilla con tu bonito abrigo, gorro y bufanda, haciendo fotos y riéndote de la gente que sale corriendo del agua tan rápido como entró en ella. En cualquier caso, ¡podrás formar parte de la diversión!
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