El scrapple es una comida reconfortante que existe desde la Edad Media. Cuando los alemanes lo trajeron, los holandeses de Pensilvania consiguieron mantener viva esta tradición a medida que avanzaba el tiempo. Este plato de carne tiene fama de inusual por lo que se hace. Si tienes curiosidad por saber de qué se trata, sigue leyendo aquí para conocer la historia del scrapple y cómo puedes prepararlo tú mismo.
Historia del Día del Scrapple
El scrapple es un plato elaborado con los restos de la matanza de distintos animales, como cerdos, pollos y vacas, más concretamente con las vísceras y los órganos internos, que se hierven, se pican y se mezclan con pan de maíz, harina de trigo y especias. Luego se hace una hogaza, se corta en rodajas y se fríe en la sartén. El scrapple tiene su origen en la Europa medieval, de la mano de los alemanes, y luego llegó a través de los holandeses de Pensilvania, que llamaron al plato panhaus, que se traduce como «conejo de sartén». El scrapple es conocido como una comida local del Atlántico medio, que se sirve como comida étnica de los holandeses de Pensilvania y los amish.
Aunque el scrapple está disponible en la región del Atlántico medio, un sólido 85% de los habitantes de la región dicen que no lo comerán debido a su composición. El scrapple, aunque esté hecho de restos de ganado, puede ser sabroso para los aventureros de corazón. El Día del Scrapple se creó para ayudar a convencer a la gente de que sea aventurera con su comida, y también para que conozca su historia. Aunque el plato en sí puede hacerse con una gran variedad de ingredientes, tradicionalmente se hace con las sobras de los cerdos y se condimenta con hierbas como salvia, pimienta negra y tomillo. Se puede adaptar a la carne que quieras, al relleno que quieras y a las especias que creas que pueden funcionar.
Cómo celebrar el Día del Scrapple
Si quieres aprender a hacer scrapple, aquí tienes una receta que puedes seguir; coge medio kilo de carne magra de cerdo y hiérvela hasta que esté cocida. Luego mezcla tres tazas de harina de maíz, una cebolla picada, una cucharadita y media de sal, una cucharada de pimienta y una cucharadita de salvia molida. A continuación, añade la carne cocida y tres litros de agua hasta obtener una pasta blanda. Una vez bien mezclada, moldea una hogaza y métela en el frigorífico durante una hora aproximadamente.
Una vez moldeada, corta un trozo del pan y fríelo en una sartén a fuego medio con un chorrito de aceite de oliva hasta que se dore. Si crees que el scrapple es mucho más delicioso que su reputación, comparte esta fiesta en tus redes sociales favoritas y utiliza el hashtag #scrappleday.
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